lunes, 28 de septiembre de 2015

#Porteo seguro : Posición ranita o fisiológica

      Voy a contarte cuál es la mejor manera de llevar o portear a tu bebé porque es importante hacerlo bien, con seguridad y respetando la postura natural, el crecimiento y el desarrollo del bebé.

       Podemos hablar de dos modos en esto del porteo, uno es el que nos venden las marcas de puericultura en general, que no se han parado a pensar demasiado en el bebé y sus necesidades, ni en el porteador; y el otro es lo que llamamos porteo ergonómico o porteo fisiológico, que atiende a las necesidades físicas y emocionales del bebé, adecuando el porteo a diferentes situaciones y demandas de bebé y porteador.
          Lo cierto es que son bastante diferentes, para muestra, un botón. Te dejo unas imágenes de mi cachorrita con apenas 8 meses. En la fotografía de la izquierda, con una mochila de una marca de puericultura, que permite poner al bebé de cara al mundo, y en la segunda, con una mochila ergonómica.


Porteando con un portabebés no ergonómico
Porteando con un portabebés ergonómico

Siempre digo que 
NO ES LO MISMO COLGAR A TU BEBÉ QUE LLEVAR A TU BEBÉ.


       Además, te muestro un par de imágenes de porteo en otras partes del mundo, en las que de manera intuitiva, llevan a los bebés en posición fisiológica. 

imagen extraída de Morguefile
Imagen extraída de Morguefile
      








    Por eso hoy vengo a contarte porqué llevar al bebé en esa posición en la que las asesoras de porteo nos empeñamos tanto.

     Buscamos una posición que te sonará de algo si has leído por ahí, se llama POSICIÓN RANITA. Ésta es el resultado de la observación del bebé. 
Observamos la postura que adopta de forma natural, su estructura corporal y la fisiología de su organismo e intentamos reproducir esta posición con el sostén del portabebés sobre su cuerpecito contra el nuestro. 

     En función de la edad del bebé/niño que porteamos, y de la etapa madurativa a nivel psicomotor, la posición ranita va a sufrir variantes, pero básicamente será aquella en que las piernas están flexionadas con las rodillas más altas que el culo y la pelvis está basculada hacia delante (retroversión).
Más técnicamente, las piernas están en abducción (apertura de piernas rodeando el cuerpo del porteador) y en flexión (de la articulación de la cadera, rodillas más altas que el culito).

Con esto conseguimos lo siguiente: 

- Articulación de la cadera perfectamente acoplada en el acetábulo de la pelvis (hueco de la articulación): los huesos de los bebés son cartilaginosos, aún deben osificarse, y con esta postura ayudamos a que la articulación de la cadera madure correctamente

- El menor grado de tensión en ligamentos y musculatura de las caderas: puesto que la articulación está así en reposo, esto hace que esta sea la postura más cómoda

- Espalda redondeada: la columna aún no puede soportar el peso de su cuerpo y tiene una curvatura natural hacia delante, como una "C". El hecho de que la pelvis y la cadera estén dispuestas de la manera en que describíamos antes hace que la espalda se redondee naturalmente, sin forzar. Esto ayuda a que el bebé se quede cómodamente reposando la cabeza sobre el cuerpo del porteador mientras es pequeño y después cuando lo necesite.

- El peso del bebé es sostenido sobre el culito y muslos del bebé, no hay presión sobre periné o genitales de esta manera: además de que el portabebés se ajusta al cuerpo del bebé colaborando también en el soporte del peso a través de la tensión.

- Mantenemos la columna alineada: viendo al bebé por detrás su columna debe mantenerse alineada, sin presentar ninguna curvatura, para conservar la simetría del cuerpo y no forzar su columna.


      Esta es la postura fisiológica para el bebé, de hecho, si observamos bien, ¿por qué los bebés recién nacidos se colocan siempre como una ranita? ¿Por qué su tensión muscular es justo así? 



Están preparados para ser llevados, eso les asegura la supervivencia, es su instinto el que les lleva a adoptar determinado comportamiento en este sentido. Y por ello, su cuerpo está preparado para eso. 
Somos mamíferos llevadores, y esa abertura de las piernas es justo la que necesitarían para ser llevados en nuestra cadera, su lugar natural biológicamente hablando. Esa tensión de sus músculos para adoptar la flexión de las caderas es también innata para mantenerse "agarrados", lo que sus genes les dictan.
Nuestros bebés están preparados para SER LLEVADOS.



       Y como parece lógico, no se puede llevar a un bebé en esta posición mirando hacia fuera. Simplemente porque sería imposible mantener estas premisas en relación a sus caderas y columna. 

    Cuando ponemos al bebé de cara al mundo, su espalda ya no quedará redondeada, sino que quedará en hiperextensión, lo que no es muy favorable para su columna aún no fortalecida (recordemos que un recién nacido ni siquiera sostiene la columna cervical, no controla su cabeza). 
Tampoco podremos mantener la flexión y abducción de las caderas a no ser que nos inventemos un aparato para ello, lo que no sería del todo cómodo para el que portea, por tanto, el bebé irá con las piernas colgando literalmente y con su peso cargando en genitales y periné. 
Y por supuesto, el bebé puede recibir demasiados estímulos porque sencillamente, no puede retirarse cuando lo necesita. 
Por último, de cara al mundo el bebé no tiene soporte para la cabeza si se queda dormido por ejemplo.

     Por eso no está recomendado portear de cara al mundo, sino siempre el bebé mirando hacia el porteador y en POSICIÓN RANITA, ya sea porteando delante, a la cadera o a la espalda.
Y debes saber también que, manteniendo esta postura, no hay límite de tiempo diario para portearle, así que podréis disfrutar del contacto todo el tiempo que deseéis :)



     Busca un buen asesoramiento antes de decantarte por un portabebés, no te dejes llevar por el consumo del mundo bebé sin información. Ya sabes que aquí estamos para ayudarte.


Y tú... ¿conocías la mejor manera de llevar a tu bebé? ¿La vas a poner en práctica?


viernes, 25 de septiembre de 2015

Problemas con los pañales de tela: FUGAS


    Hoy te traemos un artículo sobre pañales de tela, para todos aquellos que os habéis propuesto usarlos, ya os habéis iniciado, y necesitáis un poquito de ayuda con los pequeños "problemas" que van surgiendo con la práctica. 

    Siempre digo que los pañales de tela son muy muy sencillos de usar, que lo cierto es que son bastante parecidos a los desechables, con la diferencia de que hay que ponerlos en la lavadora y tenderlos ;) Y eso realmente no supone más que una pequeña rutina diaria o cada dos días, dependiendo de la cantidad que tengas.


¡Y los beneficios de la tela en relación a los desechables son muchos!


   Pero también es cierto que puede que al iniciarnos haya algún pequeño inconveniente... en este caso vamos a contarte sobre uno de ellos, el más común y que las mamás y papás nos vienen contando cuando pasan a visitarnos en los primeros días de uso: LAS FUGAS.

     Hay varias causas para estas fugas, y por eso hay que observar cuál de ellas es la que nos está creando el problema. 
Te proponemos que revises vuestro caso con las opciones que te damos a continuación, y quizás aquí encuentres la solución a las incómodas fugas ;)


POSIBLES CAUSAS DE LAS FUGAS CON LOS PAÑALES DE TELA:

- MAL AJUSTE

Los pañales de tela ajustan distinto que los desechables, pero además, cada marca de pañal de tela tendrá un corte distinto, igual que la ropa. Pero generalmente hay unas normas básicas que seguir.
Ajuste a la ingle
  • Suelen ser más bajos de cintura que los desechables, no hace falta que los lleves demasiado arriba pero sí que los ajustes bien, sin que los absorbentes sobresalgan del cobertor (parte impermeable)
  • Deben ajustarse a las ingles, no al muslo, para evitar que cuando el bebé mueva la pierna se abra el cobertor, dejando salir el pipí
  • Dejar las gomas bien ajustadas sin apretar. Aunque también es normal que dejen alguna marquita en la piel nueva del bebé, sin herirla, por supuesto
Que no se escapen los absorbentes fuera del cobertor
  • Que no sobresalga nada del absorbente fuera del cobertor, todo bien dentro de las gomitas





- ESTAMOS USANDO LA TALLA EQUIVOCADA

Hay que asegurarse que el pañal que usamos es adecuado para el peso del bebé, que no le queda grande ni pequeño. 
Podemos usar pañales por tallas, que ajustan con menos bulto y se usan en una franja de peso determinada. O podemos usar unitalla, que abultan un poco más y hay que ajustarlos bien al bebé cerrando los corchetes para adaptarlos, sin llevarlos más abiertos de la cuenta porque creamos que así le aprietan menos. Debemos ajustarlos.

- EL PAÑAL NO CUENTA CON SUFICIENTE ABSORBENCIA

En este caso deberíamos mirar varios factores, así que los enumeramos para que puedas observar si alguno de los que te proponemos es vuestro caso.
  • Los lavados previos son insuficientes: Algunos materiales necesitan varios lavados para ir adquiriendo cada vez más capacidad de absorbencia. Pasa así con los tejidos absorbentes naturales, que deben eliminar antes de estar al máximo de su funcionalidad las resinas propias de la planta (ocurre con el cáñamo, el bambú o el algodón). Así es que a medida que los vamos lavando ocurre la magia de que cada vez son más absorbentes. Piensa en ello cuando uses tus pañales, quizás aún les falta un poco de trote.
Lavando pañales de tela
  • No estás usando los absorbentes necesarios para la edad y pipí de tu bebé: Los bebés recién nacidos no necesitan mucha absorbencia porque sus pipís suelen ser en poca cantidad y además cambiamos el pañal muchas más veces al día, pero a medida que tu bebé crece, vas a necesitar actualizar la absorbencia de tu pañal para poder mantenerlo puesto durante algo más de rato sin fugas. Puede que sea tu caso, con un bebé de alrededor de 4-6 meses, así que piensa si necesitas iniciarte con el uso de absorbentes extra.
  • No estás cambiando el pañal con suficiente asiduidad: Es posible que tu bebé haga más pipí del que crees y necesites cambiar el pañal más a menudo. Hay bebés más meoncetes que otros.
  • El material con el que está confeccionado el pañal no tiene buena calidad en absorbencia o impermeabilidad: Por eso hay que estar atento a las calidades de los pañales que usamos. También a los materiales absorbentes, pues generalmente hay diferencias que hacen que tengas más o menos capacidad, por ejemplo, los sintéticos suelen absorber menos, y para que absorban mejor, tienen que tener mayor grosor. 


- PROBLEMAS DE IMPERMEABILIZACIÓN

Imagen extraída de Google
Quizás no hemos tratado demasiado cuidadosamente los pañales y hemos usado detergentes que contienen productos que pueden impermeabilizarlos, evitando que puedan absorber el pipí y éste resbala por la superficie hacia fuera. Esto también puede ocurrir si usamos cremas con base aceitosa que entran en contacto con el tejido.

Por eso hay que tener cuidado con los productos que usamos, siempre detergente con los menos añadidos posibles, sin suavizantes, aditivos, perfumes, enzimas ni lejías...
Si sientes que tus pañales están en este caso, debes enjuagar al máximo para eliminar todo lo que puedas lo que haya podido quedar residualmente en el pañal.

- ROPA O CINTURONES AJUSTADOS EN LA ENTREPIERNA DEL BEBÉ

Este es un punto bien importante, porque es muy muy fácil de solucionar, y en muchas ocasiones el causante principal de las fugas.
La ropa del bebé no debe nunca quedar ajustada en el tiro, ni los bodies, ni los pantalones, ni las mallas, ni los leotardos... Si el tiro queda ajustado, lo que hacemos es una presión en la parte central del pañal y consecuentemente se abre por los laterales (en la zona interior de las ingles). Así el pipí puede comenzar empapando esta zona y hace como un efecto mecha mojando el resto del pantalón.
Lo mismo ocurre con los cinturones de la sillita del coche, del carrito de paseo, de la silla... si tiene cierre entre las piernas, no debemos ajustarlo  demasiado en esta zona, que no ejerza presión sobre el pañal, porque al sacarlo de allí nos podemos encontrar con la desagradable consecuencia de las fugas y el cambio de ropa del bebé...




    Todo esto son cositas a tener en cuenta cuando estamos usando pañales de tela. Que pueden parecer tonterías, o cosas obvias, pero que con el uso es posible que nos cueste darnos cuenta de alguna de ellas y optar por dejar los pañales cuando son fácilmente solucionables.

    Recuerda que si necesitas más ayuda que la simple información general, en A-brazos estamos disponibles para asesorarte sobre su uso. Puedes ponerte en contacto con nosotros cuando lo necesites ;)




Y tú... ¿Has peleado con las fugas y los pañales?
¿Se te ocurre alguna otra causa para las fugas y como solucionarla?


lunes, 7 de septiembre de 2015

CINCO CONSEJOS PARA COMPRAR UN PORTABEBÉS

   Hoy te traemos CINCO PUNTOS IMPORTANTES cuando vas a comprar un portabebés.

    Atentos si estáis esperando a vuestro bebé y aún no habéis hecho la compra de este accesorio para llevar a vuestro cachorrito cuando nazca. 
También si os han dejado uno y queréis conocer más sobre porteo para saber si el que os prestaron es un buen portabebés.
Y por supuesto, si ya lo habéis adquirido, de repente este artículo os puede dejar claro si habéis hecho o no una buena elección, y si no es así, espero que estéis a tiempo de cambiarlo por otra cosa y escoger el que realmente se ajusta a la manera óptima de portear a vuestro bebé ;)


1 - Desconfía de los portabebés que te permitan poner al bebé de cara al mundo

Si les colocamos así, estaremos forzando una postura no natural, hiperextendiendo su columna y haciéndole soportar un peso para el que no está preparada ni su espalda ni sus genitales... NO HAY NINGÚN MOMENTO EN QUE SEA RECOMENDABLE PONERLES DE CARA AL MUNDO. Para bebés curiosos, portabebés a la cadera o a la espalda


2 - Un buen portabebés no tiene porqué ser el más caro

Aunque lo diga la vecina, tu prima o la de la tienda. #hedicho
Hay portabebés de todos los precios, y puede que justo el que se adapte a vuestras necesidades no sea el más caro, y eso no quiere decir que no sea estupendo para vosotros.
Las mochilas suelen tener precios más altos, pero que cueste 170 euros no es sinónimo de calidad, de buena postura, ni de que tu hijo vaya a estar mejor ni a ser más feliz.
Así que no escojas en función del precio, escoge informado, y prueba para poder escuchar lo que sientes con ese portabebés.


3 - No hay un portabebés perfecto para todos

Aunque lo diga la vecina, tu prima o la de la tienda. #hedicho
Porque cada uno tiene unas necesidades, porque no es lo mismo llevar a un bebé recién nacido que a un bebé de 2 años, porque no todos nos sentimos cómodos con las mismas cosas, sea un portabebés, la ropa o los zapatos. Algunas personas son más atrevidas, otras son más prácticas, otras son más calurosas... 
Así que huye de los comentarios del tipo: "este es el mejor que hay" porque será para esa persona, pero quizás no para ti.
Nosotros en casa, ni siquiera hemos podido decir que tal o cual portabebés es perfecto para todas las etapas, hemos ido adaptando el porteo a diferentes momentos de nuestra vida.

Una vida porteando


4 - Atentos a que el portabebés que escojáis respete la posición que es más fisiológica para vuestro bebé


Rodillas flexionadas, más altas que el culito, como una ranita, y espalda redondeada.













Y por último, y puede que LO MÁS IMPORTANTE:

5 - Compra tu portabebés en un lugar en el que puedan ASESORARTE DESDE LA INFORMACIÓN BASADA EN LA EVIDENCIA y con la capacidad de MOSTRARTE CÓMO PONER A TU BEBÉ DE MANERA CORRECTA

No vale que te cuenten que puedes mirar videos o que lleva instrucciones, debes salir de la tienda con tu portabebés perfectamente ajustado, y con la sensación de que sabes hacerlo. Y si después no sabes en casa, vuelve al punto de venta, porque si son buenas asesoras, te mostrarán qué falla y qué pasos te han hecho olvidar tus hormonas puérperas ;)

Y si compras online, también podéis encontrar un modo de mostrarte mediante whatsapp, imágenes, videos, skype... 




     Porteando a tu bebé en la posición correcta y con el portabebés ideal, puedes llevarlo tantas horas como quieras al día, y tanto tiempo como desees portearlo.

ACUDE A EXPERTOS EN PORTEO,
acude a una asesora.




Y tú... ¿estás pensando en comprar un portabebés para llevar bien cerca a tu tesoro? 
¿Te has informado y has buscado un buen asesoramiento?